Es curiosa la cara que te pone una tía que piensa que eres gilipoyas. Esa expresión facial con cara de pocos amigos mientras te sonríe, o no. Es la expresión clara de que no podemos controlar todo, no podemos caer bien a todo el mundo, no podemos repartir lo finito, no hay café para todos.
Salir de casa tiene sus riesgos, siempre se me olvida colocar una protección plastificada en las relaciones entre tú y yo. Tú, desconocida o mal conocida por alguien que no habló bien de ti o te vió encima de un escenario y yo, que no sé quién coño eres.
Te veré en otra vida, quitándote los calcetines.
Comentarios
Publicar un comentario